martes, 3 de febrero de 2009

El Sintoísmo, la religión del Japón



El sintoísmo (shinto= es predominantemente una religión japonesa. Según la Nihon Shukyo Jiten (Enciclopedia de religiones japonesas): "La formación del sintoísmo casi se identifica con la cultura étnica japonesa, y es una cultura religiosa que nunca se practicó por separado de esta sociedad étnica".  A todo esto hay que destacar que el sintoísmo carece de doctrinas claras, de teología detallada y de un fundador.

La historia de cómo empezó

La designación japonesa "shinto" para el sintoísmo surgió en el siglo VI E.C como medio de distinguir del budismo (que estaba infiltrándose en Japón) la religión local. La religión de los japoneses existía antes de que llegara el budismo, pero era una religión del subconsciente, que consistía en costumbres y hábitos populares. Sin embargo, la introducción del budismo hizo que la gente se diera cuenta de que aquellas costumbres populares constituían una religión japonesa, a diferencia del budismo, que era una religión extranjera.

Es difícil decir con exactitud cuándo empezó el sintoísmo original. Con el advenimiento del cultivo  de tierras húmedas para la producción del arroz, fue necesario tener comunidades bien organizadas y estables para cultivar la tierra, y se desarrollaron ritos agrícolas que después desempeñaron un papel importante en el sintoísmo. Aquellos pueblos primitivos concibieron numerosos dioses de la naturaleza, y los reverenciaron.

Además de esta reverencia, el temor a las almas de los difuntos dio origen a ritos con que se procuraba apaciguarlas. De esto con el tiempo se desarrolló la adoración de los espíritus ancestrales. Según el sintoísmo, un alma que ha partido todavía tiene su personalidad y se mancha con la contaminación dela muerte inmediatamente después de morir. Cuando los que están de duelo ejecutan ritos de conmemoración, purifican el alma del que ha muerto hasta el punto de librarla de donde inclinación al mal, y esa alma adquiere un carácter apacible y benévolo. Con el tiempo el espíritu del antepasado asciende a la posición de una deidad ancestral o guardiana.

Se creía que los dioses de la naturaleza y los dioses ancestrales eran espíritus que flotaban en el aire y lo llenaban. Durante las festividades la gente invocaba a los dioses para que descendieran a los lugares que específicamente hubieran sido santificados para aquella ocasión. Se decía que los dioses habitaban temporalmente en shintai (objetos de adoración como árboles, piedras, espejos y espadas). Los chamanes o médium presidían en los ritos en que se invocaba a los dioses.

Es difícil decir con exactitud cuándo empezó el sintoísmo original. Con el advenimiento del cultivo  de tierras húmedas para la producción del arroz, fue necesario tener comunidades bien organizadas y estables para cultivar la tierra, y se desarrollaron ritos agrícolas que después desempeñaron un papel importante en el sintoísmo. Aquellos pueblos primitivos concibieron numerosos dioses de la naturaleza, y los reverenciaron.

Además de esta reverencia, el temor a las almas de los difuntos dio origen a ritos con que se procuraba apaciguarlas. De esto con el tiempo se desarrolló la adoración de los espíritus ancestrales. Según el sintoísmo, un alma que ha partido todavía tiene su personalidad y se mancha con la contaminación de la muerte inmediatamente después de morir. Cuando los que están de duelo ejecutan ritos de conmemoración, purifican el alma del que ha muerto hasta el punto de librarla de donde inclinación al mal, y esa alma adquiere un carácter apacible y benévolo. Con el tiempo el espíritu del antepasado asciende a la posición de una deidad ancestral o guardiana.

Se creía que los dioses de la naturaleza y los dioses ancestrales eran espíritus que flotaban en el aire y lo llenaban. Durante las festividades la gente invocaba a los dioses para que descendieran a los lugares que específicamente hubieran sido santificados para aquella ocasión. Se decía que los dioses habitaban temporalmente en shintai (objetos de adoración como árboles, piedras, espejos y espadas). Los chamanes o médium presidían en los ritos en que se invocaba a los dioses. A veces una montaña entera, como el monte Fuji, era visto como un shintai.




Gradualmente, los "lugares de aterrizaje" de los dioses, lugares purificados temporalmente para las fiestas, adquirieron carácter más permanente como tales. La gente construía santuarios para los dioses benévolos, los que aparentemente bendecían a sus adoradores. Al principio la gente no tallaba imágenes de los dioses, sino que adoraba los shintai, en los cuales se decía que residían los espíritus de los dioses. Con el tiemp los dioses fueron tantos que los japoneses desarrollaron la expresión yaoyorozu no kami, que literalmente significa "ocho millones de dioses". Hoy esa expresión se usa para significar un "sin número de dioses", pues la cantidad de deidades sintoístas sigue aumentando.

A medida que las ceremonias sintoístas fueron concentrándose en santuarios, cada clan veneró a su propia deidad guardiana. Sin embargo, en el siglo VII E.C., cuando la familia imperial unificó a la nación, elevó a su diosa-Sol, Amaterasu Omikami, a la posición de deidad nacional y la hizo la figura central de los dioses del sintoísmo. Con el tiempo se presentó el mito de que el emperador era descendiente directo de la diosa-Sol. Para fortalecer esa creencia, en el siglo VIII E.C. se compilaron dos prominentes escritos del sintoísmo, el Kojiki y el Nihon shoki.
Estos libros contenían mitos que ensalzaban a la familia imperial como descendientes de los dioses, lo que ayudó a establecer la supremacía de los emperadores.

Los japoneses en general no podían menos que adorar al emperador bajo el sintoísmo estatal y su sistema imperial. La enseñanza de Norinaga Motôri (No preguntes nada, sino sométete a la providencia divina) dominaba el pensamiento japonés. En 1941 toda la nación fue movilizada para el esfuerzo bélico de la II Guerra Mundial bajo la bandera del sintoísmo del estado y en dedicación al "hombre-dios viviente". Los soldados y sus familias pedían a sus dioses guardianes que les concedieran éxito en la guerra. 



Sin embargo, cuando Japón fue derrotada en 1945 bajo los golpes gemelos de la aniquilación atómica de Hiroshima y gran parte de Nagasaki, el sintoísmo afrontó una crisis severa. De la noche a la mañana el supuestamente invencible gobernante divino Hiro-Hito llegó a ser sencillamente el derrotado emperador humano. La fe de los japoneses quedó aplastada. El kamikaze le había fallado a la nación. Una de las razones para ello fue la desilusión que experimentó la nación al verse traicionada. Peor todavía, el mundo del sintoísmo no dio ninguna explicación religiosa bien pensada y apropiada para las dudas que surgieron debido a la derrota. De ahí que la reacción religiosa inmatura de 'No hay dios ni Buda' se hiciera tendencia general.

Sin embargo, hoy en día, el sintoísmo está tan inextricablemente entretejido con la vida cotidiana japonesa que la gente casi no se da cuenta de que ese sistema existe. Para los japoneses el sintoísmo es menos una religión que un elemento del ambiente que no estorba, como el aire que respiran. 

Fiestas relacionadas con el sintoísmo

El año de los japoneses está lleno de festividades religiosas, o matsuri. A continuación se da una lista de las principales:

  • Sho-gatsu, o la Festividad del Año Nuevo, del 1 al 3 de enero.
  • Setsubun: se arrojaban habichuelas dentro y fuera de los hogares, mientras la gente grita: "Diablos, afuera; buena suerte, adentro". 3 de febrero.
  • Hina Matsuri, o Festividad de las Muñecas, para las niñas, celebrada el 3 de marzo. Se despliega una plataforma con muñecas, en representación de una casa imperial antigua.
  • La Festividad de los Niños, el 5 de mayo; se ondean Koi-nobori (tiras de carpa que simbolizan fortaleza) atadas a palos.
  • Tsukimi; se admira la luna llena del otoño, mientras se ofrecen pequeñas tortas redondas de arroz y las primicias de las cosechas.
  • Kanname-sai, el emperador ofrece el primer arroz nuevo, en octubre.
  • Ninnami-sai es una celeberación de la familia imperial en noviembre, cuando el emperador, quien preside como sacerdote principal del sintoísmo imperial, prueba el nuevo arroz.
  • Shichi-go-san, que significa "siete-cinco-tres", es una festividad celebrada por las familiares sintoístas el 15 de noviembre. El siete, el cinco y el tres se consideran años importantes de transición, niños en kimonos de vistosos colores visitan el santuario de la familia.
  • También se celebran muchas festividades budistas, entre ellas el cumpleaños de Buda, el 8 de abril, y la Festividad Obon, el 15 de julio, que termina cuando se hace que unas linternas floten en el mar o en un río "para guiar a los espíritus ancestrales de regreso al otro mundo".

2 comentarios:

  1. Muy interesante tu Blog..,me gustaria conocer mas acerca de lasa bases del sintoismo practicas costumbres etc,y también de la foto de los ritos o unh sacerdote sintoista.
    Gracias,
    sanhta89@hotmail.com

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